Las personas con diabetes tipo 2 que siguen una dieta baja en carbohidratos y, por tanto, posiblemente rica en proteínas, pueden "mejorar significativamente" su función renal, según sugieren las últimas investigaciones.
El estudio, dirigido por el Dr. David Unwin, ha desacreditado informes anteriores que afirmaban que la ingesta elevada de proteínas promueve el daño renal y que las dietas bajas en carbohidratos en sí mismas pueden aumentar el riesgo de complicaciones cardiovasculares.
Durante el trabajo, el equipo de médicos evaluó a 143 adultos (edad promedio de 61 años) con diabetes tipo 2 que eligieron una dieta baja en carbohidratos durante más de dos años. La dieta fue diseñada con el objetivo de mejorar los niveles de azúcar en sangre reduciendo la ingesta de alimentos azucarados y ricos en almidón como pan, patatas y arroz, reemplazándolos con, por ejemplo, verduras de hojas verdes, lácteos enteros, huevos, carne no procesada, pescado. , bayas y nueces.
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